GOLDEN POST 1: Te amé como se aman las cosas importantes


Y acá estoy acostado otra noche repasando los momentos que vivimos juntos. Otra noche que se suma a otras tantas de las que ya perdí la cuenta. Y hasta me enojo conmigo mismo porque no me queda otra que admitirlo: te amé como se aman las cosas importantes.Y por ser fiel a lo que siento, que aún está un poco lejos de ser pasado y ser sanado, es que el dolor se siente así, a flor de piel.

Y por momentos como un boludo más me pregunto ¿qué fue lo que hice mal?¿qué debería haber hecho diferente para que no se acabara lo nuestro?¿qué cosas fueron las que no ví y que terminaron sepultando lo que aún estábamos construyendo? Y elaboro cientos de teorías en mi cabeza que no tienen ningún tipo de explicación porque a ellas siempre les va a faltar una parte: vos.

Y quiero que este sea mi primer "Posteo Dorado" porque de cada dolor de mi vida siempre ha nacido un aprendizaje; y ésta no es la excepción. Fuiste la primer persona de la que volví a enamorarme después de todo lo que viví en mi pasado. Fuiste la bisagra que me mostró que estaba listo para volver a hacerlo, y que un nuevo tiempo había llegado a mi vida.

Porque acá va mi primer aprendizaje: la vida muchas veces se trata de encontrar la certeza de que estás listo para algo. Se trata de saber que estás preparado para vencer el miedo y animarte finalmente a descibrir algo nuevo de vos en eso que estás dispuesto a emprender.

Y solo yo sé lo que puse en juego en esto que no funcionó; y todos los miedos e inseguridades a los que tuve que hacerle frente para permitirme estar al lado tuyo. Temores que por momentos se disipaban, pero que en otras ocasiones me hacían perder el sueño.

Pero cuando estuve listo, cuando fui capaz, pude darme cuenta de que con vos lo quería todo. Y ese amor imperfecto, quizás hasta deficiente, fue lo más genuino y maduro que pude darte en este momento de mi vida. Y aunque no te haya alcanzado quiero decírte que estoy orgulloso de eso. Incluso aunque no hubiera alcanzado para que eligieras quedarte.

Entonces llega mi segunda enseñanza: el día que nos despedimos te dije que hubiera preferido que me dijeras que ya no me amabas, o que ya no te gustaba, y que eso estaría bien para mí porque a cualquiera le puede pasar. Recuerdo que con tus ojos cansados me miraste y me dijiste: no voy a decirte algo que no siento.  Y fue en ése momento que me di cuenta que el amor perfecto no existe. El amor es, siendo.

Y acá se acaban las especulaciones de las que hablaba (o mejor dicho escribía) anteriormente. El amor se termina cuando al menos en uno de los dos deja de ser. Deja de ser motor, impulso, deseo, encuentro, búsqueda, acierto, error, admiración y a la vez desafío. Deja de ser eso que te hace abrazar lo imperfecto del otro y trae calma al imperfecto. 

Y deja de ser seguramente por muchos motivos. Vos habrás tenido los tuyos y yo con el tiempo iré encontrando los míos. Pero la certeza que es para mí hoy la herramienta que me ayuda a parar y pensar qué me llevo de esto que fuimos y también de lo que no llegamos a ser es que te amé como se aman las cosas importantes de la vida

Comentarios

  1. Estupendo.....Morite de amor, cagòn....frase célebre para mi.

    ResponderEliminar
  2. Hermoso Martín, y las relaciones siempre nos dejan una enseñanza.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

EPISODIO CATORCE: POR AMOR TE PERDONÉ LO QUE NO SE PERDONA

EPISODIO QUINCE: BOLUDOS CONSCIENTES

Episodio TRECE: HERIDAS