Episodio OCHO: QUERER/TENER

Los boludos solemos querer lo que no podemos tener

Parece difícil de creer, aunque verdaderamente es que no tanto; ya que esta característica nos hace esencialmente unos boludos y boludas. El tema es que siempre, o mejor dicho, la mayoría de las veces, solemos querer lo que no podemos tener

Parece "cosa e mandinga" porque al yo escribirlo y ustedes leerlo, suena como algo tan obvio y sencillo de evitar. Pero no, ahí estamos nosotros queriendo lo imposible. O al menos, lo que no es posible para nosotros y nosotras en el momento de la vida en que lo deseamos.

Y seguramente si nos ponemos a escudriñar en nuestra propia historia, vamos a encontrar momentos puntuales en los que la vida, dios, la suerte o el destino, nos brindaron de alguna u otra forma eso que esperábamos. Pero sólo cuando estuvieron seguros de que era el momento indicado. Ni antes, ni después.

O también, momentos en los que pudimos ver con claridad que eso que en algún tiempo deseamos o esperamos para nosotros, en realidad no era lo que necesitábamos, lo que nos iba a hacer bien, lo propicio para nuestra vida. Y el boludo promedio, lejos de reconocerlo y aprender, se hace el boludo.

El tema es que aún así, muchas veces nos empecinamos en querer encontrarle la vuelta a las cosas para que cuadren. Para que encajen en lo que creemos que es mejor para nosotros en este momento. Y no hay quien nos haga entrar en razón, eh? Nos volvemos nenitos caprichosos haciéndole un berrinche a la vida. Y no hay argumento, lectura, análisis o intervención que haga mella en nosotros. 

Solo una buena dosis de realidad sin filtros. A veces a través de un amigo o amiga habilitado para tal emergencia. Otras a través de tu terapeuta, en el mejor de los casos de que hayas reconocido que hay veces que la boludez requiere asistencia profesional (sin ánimos de ofender)

Pero la mayoría de las veces sólo nos puede salvar el golpe de la cruda realidad. La experiencia que aunque te la cuenten mil veces, es única e intransferible. Hay que atravesarla. Hay que vivirla en carne  propia. Tiene que dejar en nosotros esa cicatriz que nos recuerde nuestras fragilidades más profundas.

Comentarios

  1. " Nos volvemos nenitos caprichosos haciéndole un berrinche a la vida.".....me encantó! 😘

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    1. Absolutamente. Cuántas de nuestras carencias vienen de esos nenitos y nenitas caprichosos.

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